¿Una bicicleta eléctrica que no hiciera falta enchufar para cargar sus baterías? Solo puede suceder si se emplea la energía solar, por eso, una compañía holandesa ha creado este prototipo completamente funcional que permite recargar una bici eléctrica en unas cuatro horas usando solo la energía solar.
La bicicleta eléctrica es la verdadera alternativa a la movilidad en la ciudad, de esto no hay ninguna duda, pero existen peros, ¿verdad? Muchas ciudades tienen un sistema público de alquiler de bicicletas eléctricas con muchas ventajas pero también algunos inconvenientes. Lo que hoy os planteo es darle una pequeña vuelta de tuerca al concepto de bicicleta eléctrica.
La revolución en este sector tenía que venir de Holanda, donde las bicicletas son un medio de transporte muy, muy empleado por los habitantes de sus grandes ciudades. Solarapplab ha creado un prototipo de bici eléctrica solar que promete solucionar uno de los inconvenientes de este tipo de bicicletas, la carga. Sacar la batería de la bicicleta, subirla a casa o al trabajo, ponerla a cargar y volver a introducirla en la bici es tedioso. ¿Te imaginas que pudieras cargarla por completo en unas cuatro horas gracias a la energía solar?
Los responsables van a realizar una prueba de 8.000 kilómetros entre las ciudades de Milán y Astana a los mandos de esta bicicleta eléctrica solar.
Lo más interesante de esta bicicleta eléctrica es que no es una bicicleta. Es un kit que puede ser instalado en todo tipo de bicicletas de esta tipología para usar las llantas como grandes paneles solares que permitiría cargar las baterías. Es decir, según los desarrolladores, por unos 500 dólares (unos 400 euros) podrás añadirle esta capacidad de recarga solar a tu bicicleta eléctrica, un coste elevado al que hay que sumar los diferentes equipos para electrificar una bicicleta convencional.
Esta bicicleta se carga mientras se maneja, aunque muy parcialmente, por lo que sería técnicamente posible, que tuviéramos que necesitar una carga completa muy pocas veces puesto que al moverse, generaríamos algo de energía, menos de la que emplearíamos para movernos, pero algo es algo. Y recuerda, si te quedas sin batería, siempre puedes pedalear.
Es en la libertad que puede ofrecer una bicicleta eléctrica solar donde radica lo interesante del concepto. Movilidad casi gratis en las ciudades y contaminando 0, ni en el proceso de recarga pues se emplearía la luz solar. Esto evidentemente, es solo un sistema de recarga, y en los días nublados o por la noche, no quedará otra más que usar un enchufe para cargar la batería de la bicicleta.
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